La ruta del vino Binissalem Mallorca gira alrededor de una gastronomía tradicional balear diversa, las bodegas de la denominación de origen y un paraje salpicado de almendros, algarrobos, olivos, higueras y viñas, con la Sierra de Tramuntana como telón de fondo.

Además de una maravillosa red de senderos, la ruta del vino Binissalem Mallorca también ofrece la posibilidad de visitar cinco municipios de interior: Santa María del Camí, Sencelles, Consell, Santa Eugènia y Binissalem.
Cada uno cuenta con su encanto, desde Binissalem y su arquitectura en piedra con casas señoriales e interesante presencia barroca, hasta Santa Eugènia y sus molinos de viento convertidos en viviendas o el conjunto arquitéctónico de Ses Coves, que incluye cuevas prehistóricas, pasando por Consell y sus construcciones más antiguas, vinculadas al mundo del vino, en el camino de Muntanya, una antigua ruta de transhumancia activa hasta mediados del siglo XX.